M. Raspal Jorquera
Electricista de profesión y autónomo desde hace 30 años, Isaías Juan Pérez nació y creció en Cañaveras, aunque pasó parte de su juventud en Valencia. Tras conocer a su mujer, natural de Albalate de las Nogueras, volvió a la Alcarria conquense para casarse y formar una familia en su pueblo, del que es alcalde desde hace tres años. Pese a que su experiencia política era nula, en 2011, ante las "difíciles" circunstancias económicas y de convivencia que atravesaba la localidad, se sumó a un grupo de vecinosque decidieron presentarse a las elecciones municipales para intentar cambiar, en la medida de lo posible, aquella situación. Consciente de que en estos pequeños municipios la línea que separa lo político de lo personal no está muy definida, compagina su trabajo diario con lo que él considera la "verdadera política": escuchar y tratar a todos por igual, "aunque no compartas lo que te proponen".
Zascandileando por Cuenca
Todos sabemos que esta comarca es muy singular. Su orografía, su gente, su cultura, su patrimonio, su gastronomía...Dentro de esta última, reina por encima de todos los alimentos típicos un edulcorante con Denominación de Origen Protegida. Nos referimos, por supuesto, a la miel de la Alcarria. Esta sustancia natural es producida por las abejas a partir del néctar y las secreciones de partes vivas en las plantas, que recolectan los insectos y las combinan con sustancias específicas propias. Tras su recogida, las transportan a colmenas donde se almacenan. La miel tiene multitud de propiedades beneficiosas para el organismo, incluyendo un valor energético muy alto. En 1992, la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, con el fin de garantizar la calidad del producto, otorga la Denominación de Origen. Es en 1996 cuando la Comisión Europea la registra como Denominación de Origen Protegida (D.O.P.)
Zascandileando por Cuenca
Este mes vamos a hablar de una región que comparten las provincias de Cuenca y Guadalajara, dentro de la propia comarca de la Alcarria. Forman parte de esta zona una serie de pueblos que, a pesar de tener en algunos casos jurisdicciones administrativas diferentes, comparten características propias, como es el caso de su historia, costumbres, economía y el paisaje en torno al valle del río Guadiela. Nos referimos a la Hoya del Infantado. Esta región comprende las villas de Alcocer, Salmerón y Valdeolivas, junto con otros pueblos de menor tamaño como pueden ser Salmeroncillos, Albendea, Villar del Infantado, San Pedro Palmiches, Castilforte o Millana, todos ellos comprendidos entre el norte de la Alcarria de Cuenca y el sur de la de Guadalajara.
Zascandileando por Cuenca
Arreglar el mundo. Hablar del tiempo. Solucionar los problemas del pueblo. Invitar a un vino rápido. Echar el aperitivo en la hora del Ángelus…Existen múltiples razones por las que pasar un buen rato en la cueva. Evidentemente, no estamos hablando de cuevas donde habiten animales salvajes o moras encantadas. Nos referimos a las conocidas cuevas del vino, las cuales se utilizan para elaborar y conservar esta bebida. Se encuentran en muchos municipios de la provincia de Cuenca, principalmente en la comarca de la Alcarria. Hablamos de pueblos como Villar de Domingo García, Arrancacepas, Albalate de las Nogueras, Mazarulleque, Villaconejos de Trabaque, Castejón o Torralba y un pueblo que nos afecta de lleno, Horcajada de la Torre.
Texto y fotos: Zascandileando por Cuenca
Suele ser común elaborar reseñas sobre municipios y, en su interior, describir brevemente las construcciones más destacadas. Pocas veces nos paramos con detalle a explicar los monumentos. La Alcarria conquense posee un patrimonio espléndido y poco reconocido. Por ello, hoy traemos un post dedicado a uno de los templos más impresionantes dentro de su geografía. Ubicada en Canalejas del Arroyo, vamos a conocer un poco más sobre la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción. Su construcción debió comenzar antes de 1574 —fecha que data en una inscripción del exterior, aunque no se puede concretar si fue la de su término o de una de sus fases, según apunta su párroco, el Padre Pascual—, no puedo concretar si fue el termino de la Iglesia o una de sus fases y se prolonga durante el siglo posterior, trabajando en ella notables canteros como Martín de Ocaña, Rodrigo de la Pedrosa y Hernando de Palacio. Es un edificio de un volumen considerable, similar a las fortalezas. Originalmente constaba de tres naves, pero al fallar las columnas o arcos, tuvo que ser reforzada con voluminosos contrafuertes (muy llamativos) y arcos complementarios ante la posibilidad de venirse abajo.