Plantación del joven olmo con los vecinos de Cuevas de Velasco. Foto: Fundación Soliss.
Redacción
La 'Plazuela del Olmillo’ de Cuevas de Velasco vuelve a hacer honor a su nombre tras la plantación de un ejemplar resistente a la grafiosis ocupando el lugar del viejo olmo que, según los documentos conservados por el Ayuntamiento, existió al menos desde 1752 hasta 1990, cuando acabaron con él la edad y la grafiosis, la enfermedad que durante los años 80 supuso la desaparición de más del 90% de estos árboles en España. Sin embargo, los olmos continúan volviendo a presidir las plazas de los pueblos de la Alcarria conquense gracias a iniciativas como Proyecto Olmo, que promueve la Fundación Soliss en Castilla-La Mancha.
El viejo olmo de Cuevas de Velasco ("el abuelo") murió en 1990. Foto de Antonio Ballesteros Collado.
Esta entidad firmó un convenio en mayo de 2017 con el Ministerio de Medio Ambiente para que estos ejemplares provenientes del ‘Programa Español de Conservación y Mejora de los Olmos Ibéricos’ —desarrollado desde 1986 de forma pionera a nivel internacional por el citado ministerio, en colaboración con la Universidad Politécnica de Madrid— recuperen su lugar en las plazas, calles y lugares emblemáticos de los municipios y sigan siendo un “símbolo de convivencia” y su sombra un “punto de encuentro” como el germen que fue de los primitivos “ajuntamientos”: reuniones de vecinos para decidir las cuestiones importantes para el pueblo, término del que procede la palabra ayuntamiento. Durante los más 30 años que llevan investigando cómo atajar esta devastadora enfermedad, han descubierto siete ejemplares de olmo autóctono (Ulmus minor) que la resisten de modo natural —se les inoculó el hongo repetidamente y no enfermaron— y están siendo clonados para su distribución por toda España.
La 'Plazuela del Olmillo' vuelve a hacer honor a su nombre con un joven ejemplar.
En Cuevas de Velasco, vecinos como el historiador Antonio Ballesteros Collado, de 90 años, han participado en la plantación del sucesor de aquel gran olmo que en la localidad llamaban >“el abuelo”, todo un “símbolo” para el pueblo. Ha sido él quien ha aportado el dato de 1752 como fecha en la que ya se tenía constancia de la existencia del viejo árbol y sus últimas fotografías (podéis ver las que han compartido en las redes sociales, así como su interesante testimonio).
Este pueblo se suma así a otros como Villanueva de Guadamejud, Villalba del Rey, Torralba, Villar de Domingo García, Noheda, Huete y Olmeda de la Cuesta (ver Alcarria Es Más, 7 de marzo de 2018) que han recuperado este árbol emblemático como avanzadilla en el rescate de una especie en peligro de extinción en todo el país. De hecho, la Alcarria conquense lidera las donaciones en la provincia que ha realizado el ministerio desde 2015 (ver Alcarria Es Más, 6 de abril de 2017), siendo Olmeda de la Cuesta el municipio que recibió los cinco primeros ejemplares libres de grafiosis de España y el que más ha plantado, unos 85.
Testimonio del historiador Antonio Ballesteros grabado por la Fundación Soliss.