Tras las huellas de una Alcarria por descubrir, la conquense

EDUCACIÓN Y CULTURA

Los clubes de lectura equiparan a los pueblos pequeños con los que tienen biblioteca y fomentan las relaciones personales

Desde hace cuatro años, una vez al mes, grupos de mujeres se reúnen en seis municipios por los que pasa el Bibliobús —como Vellisca— para comentar un libro y compartir las emociones que les ha despertado

Reunirse para leer es un "valor añadido, un modo de aprender, de ampliar horizontes y de tejer relaciones humanas” paliando "la soledad y el aislamiento de nuestra sociedad", según su coordinadora, Ana Ballesteros

Ana Ballesteros (a la izquierda) con las participantes de uno de los clubes de lectura. Foto: Bibliobuses Cuenca.

Mónica Raspal Jorquera

Desde hace cuatro años, una vez al mes<, grupos de mujeres se reúnen en el centro social, el ayuntamiento o el bar de Vellisca, Víllora, Belmontejo, Huerta del Marquesado y Boniches para comentar un libro que todas han leído, generalmente una novela —aunque también poesías, relatos cortos, noticias curiosas, refranes o recetas de cocina—, compartir las emociones que les ha despertado o discutir sobre sus personajes como si fueran seres de carne y hueso, una experiencia “de lo más estimulante”. Son los seis clubes de lectura del proyecto 'Lecturas Viajeras' que partió de la Sección del Libro, Archivos y Bibliotecas de la Dirección Provincial de Educación, Cultura y Deportes de la Junta de Castilla-La Mancha, departamento que gestiona toda la Red de Bibliotecas, incluidos los bibliobuses.

Según ha explicado a esta redacción una de esas bibliotecarias móviles y coordinadora de estos clubes, Ana Ballesteros, la Red de Bibliobuses cubre un servicio en aquellos municipios que por su poca población no disponen de biblioteca fija. Dado que estos tienen unos horarios muy rígidos porque tienen unas rutas que cumplir y debido a su “gran preocupación por prestar un servicio bibliotecario de calidad” a estos pueblos pequeños, matiza que no quieren limitarse al mero préstamo de libros, sino abarcar otras actividades de fomento de la lectura entre las que se encuentran estos clubes. También organizan y participan en otras actividades como encuentros con autores, visitas a ferias del libro, excursiones, visionado de películas relacionadas con un libro e incluso asistencia a conciertos de música. A todos ellos están invitados a participar todos los vecinos, sean o no miembros del club.

Actos programados para el 'Día del Libro' en Cuenca.

Ballesteros asegura que reunirse para leer es un “valor añadido a lo que ofrece la propia lectura, un modo de aprender, de ampliar horizontes y de tejer relaciones humanas”. Por ello, considera que estos clubes de lectura también “vienen a paliar la soledad y el aislamiento de nuestra sociedad” que a su juicio “es más grave, si cabe, en estos pequeñísimos núcleos rurales donde la oferta cultural, por razones obvias, es muy pequeña”. Así, aclara que el Bibliobús supone para ellos el único servicio cultural del que disponen y por eso está “tan bien valorado”. La bibliotecaria explica que la acogida de los clubes ha sido muy buena puesto que les proporcionan una actividad relacionada con el ocio cultural que les equipara a cualquier otra biblioteca y que además les sirve además para fomentar las relaciones personales.

El número de asistentes varía entre las 7 y 19 mujeres con edades comprendidas entre los 40 y los 80, sin contar con ningún miembro masculino. Si algún pueblo quiere sumarse a los seis que ya disponen de club tiene que ponerse en contacto con la mencionada Sección del Libro, aunque Ballesteros matiza que los ya establecidos están abiertos a la participación de lectores de municipios cercanos pues no es necesario vivir en la misma localidad para poder asistir a su club de lectura.

Proponen Cuenca y marzo de 2019 para las 'III Jornadas Bibliotecarias' Representantes de todas las Asociaciones de Bibliotecarios de Castilla-La Mancha —entre ellas la de Bibliotecarios Asociados Conquenses (BAC)— se reunieron el 21 de abril con el jefe del Servicio Regional del Libro y Bibliotecas de la Consejería de Educación, Cultura y Deporte con el objetivo de estudiar la viabilidad de organizar las 'III Jornadas Bibliotecarias'. Dado que las últimas se celebraron en Toledo en 2005, los representantes de este sector creen que "ya es momento de abordar este importante evento" para los profesionales de la comunidad. En el encuentro se pusieron en común una serie de ideas y de propuestas y se planteó como posible fecha de celebración finales de marzo de 2019 y Cuenca como sede, a propuesta de BAC. Los bibliotecarios trasladarán estas ideas a sus socios y esperarán a recibir la aprobación definitiva de la Consejería para estudiar después su financiación y viabilidad y proceder a preparar los comités necesarios para su puesta en marcha y organización.

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