Redacción
A mediados del siglo XVI, María 'La Herrera' —llamada así por ser la esposa del herrero— se hizo popular en Tinajas como supuesta hechicera pues aseguraba tener poderes de clarividencia, algo que “demostró” al predecir la muerte de un vecino el día de San Sebastián. Fue denunciada ante la Santa Inquisición y desapareció del pueblo, aunque su recuerdo perduró durante años. Un siglo después, tres hermanas del municipio también fueron acusadas de realizar rituales satánicos por hasta 34 testimonios. Son algunas de las historias de quienes fueron consideradas consideradas Brujas de la Alcarria —en esta y otras localidades como Gascueña, Villanueva de Guadamejud, Castejón, La Peraleja o Huete— rescatadas por la investigación convertida en exposición del arqueólogo Javier Fernández Ortea, que entre 2016 y 2018 se pudo ver en el Monasterio de Monsalud (Córcoles) y en la actualidad de forma permanente en Castejón, aunque recorrerá los municipios que la demanden de forma temporal y entre el 1 y el 24 de julio llegará a Tinajas, según ha anunciado el Ayuntamiento en su página de Facebook.
Simuladores virtuales de quema en la hoguera y vuelo en escoba.
La importancia de esta exhibición con “anclaje en el territorio y nuestro pasado” es que pone "nombres y apellidos" a quienes fueron "brujas con rostro” y no un producto de la imaginación colectiva, la fantasía o la leyenda. Y es que Fernández Ortea realizó un intenso trabajo de documentación e investigación en el Archivo de la Inquisición de Cuenca para contar ese “curioso” capítulo de la historia de España enriqueciéndolo con las nuevas tecnologías para que la visita fuera toda una vivencia histórica y sensorial. De hecho es el único espacio dedicado a la brujería, la hechicería, la adivinación o la nigromacia de nuestro país que incluye simuladores virtuales de vuelo en escoba, escarnio público en el cepo o quema en la hoguera, lo que potencia su atractivo e incentiva el turismo y la economía en la comarca (ver Alcarria Es Más, 31 de mayo de 2016). Cuando en 2008 la Junta de Castilla-La Mancha recuperó la gestión de Monsalud el arqueólogo y hasta entonces dinamizador del monasterio cedió este trabajo al Ayuntamiento de Castejón —uno de los consistorios que colaboró para que el proyecto saliera adelante— que la ubicó en una de las estancias municipales para las visitas del público, aunque mostró su deseo de que tenga un carácter itinerante (ver Alcarria Es Más, 6 de noviembre de 2019).
Sin comentarios